No sé exactamente quiénes eran esas personas, pero lo cierto es que me sonaban.
'Andrea, ¿cómo que quiénes somos? ¿No nos recuerdas?'
Negué con la cabeza. La chica morena empezó a hablar.
'Andrea, soy Silvia, tu hermana. ¿No me recuerdas?'
(RECUERDO QUE LOS FLASHBACKS VAN A IR EN CURSIVA)
Mamá: Chicas, ¿Estáis preparadas?
Yo: Sí -sonreí-.
Mamá: ¿Y tú Silvia?
Silvia: Sí mamá ya bajo.
Silvia bajó.
Mamá: ¿Lleváis la crema? No quiero que os queméis otra vez.
Yo: Que sí mamá, vámonos ya.
Mamá: Ay, la edad está de la pubertad que mala es, estáis revolucionadas.
Ya me acordaba de ella. Mi hermana. Habíamos pasado tantos momentos juntas.
Yo: ¿Silvia?
Ella me abrazó.
Silvia: ¿Estás bien?
Yo: Sí -le sonreí-. ¿Que ha pasado?
Silvia: Mejor que te diga Dani.
Yo: ¿Dani? ¿Quién es Dani?
El rubio de ojos azules se acercó a mi. Se sentó a mi lado.
Dani: ¿En serio no me recuerdas?
Negué con la cabeza.
Le miré a los ojos.
Yo: Silvia, pasa tu primero, que me da vergüenza.
Silvia: Que no, pasa tú, que a mi también.
Chico: Siguiente.
Silvia me empujó.
Ya me estaba acordando de los chicos de alrededor, Álvaro, Blas, David y Carlos. ¡Vale sí! ¡Carlos! El novio de Silvia. ¡AURYN! Mis ídolos. Pero Dani... no podía recordarle.
Dani: Hola guapa -me abrazó y sonrió-. ¿Que tal? ¿Es tu primera firma?
Asentí con la cabeza.
Dani: ¿Estás nerviosa?
Yo: Sí -dije con voz temblorosa-.
Silvia: Hola -sonrió-.
Dani: ¿Es tu hermana?
Yo: Sí -sonreí-.
Dani: ¿Y te llamas?
Yo: Yo Andrea, y ella Silvia.
Dani: Andrea... me gusta tu nombre -me guiño un ojo-. Gracias por venir -me sonrió-.
Yo: De nada -le abracé-.
¿Dani es el chico que está aquí sentado? ¿Lo es?
Yo: ¿Dani?
Me abrazó.
Dani: Ya pensaba que te habías olvidado de mi -me sonrió-.
Y en ese momento empezaron a venirme miles de momentos. Como le conocí, uno de los primeros conciertos. Como Silvia me enseñó a los chicos.
Pero no sé porqué Dani estaba tan preocupado... lo único que se me venía a la cabeza era que estaban aquí por Carlos, porque es novio de Silvia, no sé porqué más podrían estar aquí... ¿seremos sus amigas?
David: Menos mal que estás bien -me abrazó-.
Le sonreí.
Yo: Gracias por preocuparos chicos. Lo valoro mucho. Gracias amigos.
Y les miré a todos y les sonreí.
Silvia estaba agarrada a Carlos. Se notaba que estaba preocupada.
Me levanté de la cama y empecé a notar que todo me daba vueltas.
Dani me cogió de la cintura y noté algo. Una electricidad pasó entre nosotros dos.
Le miré a los ojos. ¿Lo habrá notado?
Dani: Si lo he notado.
Es como si me hubiera leído la mente o algo.
Dani: Aún estás débil, siéntate.
Me senté.
Yo: Chicos, os podéis ir a descansar. Estoy bien -sonreí-.
Blas: Vale... pero si está algo mal llámanos.
Álvaro: Sí, estaremos por el centro o nuestra casa.
David: Luego hablamos -me dio un beso en la mejilla-.
Yo: Vale chicos -les sonreí-.
Silvia: Nosotros nos vamos a dar una vuelta -dijo refiriéndose a ella y a Carlos-.
Carlos: Sí, cualquier cosa nos llamáis. ¿Vale Dani?
Espera. ¿Dani no se iba? ¿Por qué? ¿Por qué se quedaba?
Se fueron todos y Dani les despidió. Yo me quedé arriba, en la cama sentada.
Dani subió. Se sentó a mi lado.
Dani: Ya se han ido todos -me sonrió-.
Yo: Vale -le sonreí-.
Me miró. Había un silencio incómodo.
Dani: ¿No te acuerdas de lo que somos?
Yo: ¿Amigos?
Dani: Andrea, somos más que eso.
Se levantó y cogió su móvil que estaba en mi mesita.
Dani: Mira, ¿no te acuerdas de estas fotos?
Me las enseñó:
Dani: ¿De verdad no te acuerdas?
Y conforme iba enseñándome fotos nuestras me iban viniendo a la cabeza todo. Todo. Porqué me caí. Me había enfadado con él porque se estaba besando con otra.
Yo: ¿Que haces aquí? Vete con tu amiga.
Me abrazó.
Dani: ¡Si! ¡Sabes quién soy!
Yo: Sí. Y también sé por qué estoy así, con este golpe en la cabeza.
Dani: Tenemos que hablar sobre eso.
Tragué saliva. Iba a ser difícil hablar con él. Me iba a costar. Y mucho.
NARRA SILVIA.
Carlos y yo nos fuimos a dar un paseo por el parque, necesitábamos despejarnos un poco. Fuimos a uno que estaba cerca de mi casa por si nos llamaba Dani de que Andrea necesitaba algo.
Había un lago con barcas.
Carlos: ¿Subimos?
Yo: Vale -le sonreí-
Fuimos hasta dónde estaban las barcas y habló con el chico.
Chico: ¿Desean una barca?
Carlos: Si por favor -le sonrió-
Carlos pagó y el chico nos entregó dos remos y nos subimos a la barca.
Estando en la barca Carlos empezó a moverse.
Yo: ¡No te muevas que nos caemos!
Carlos: ¿Y que pasa si volcamos?-dijo desafiándome.
Yo: Pues que te mato-sonreí sarcásticamente-.
Carlos: Mientras que sea a besos no me importa.
Y se abalanzó sobre mí cosa que hiciera que la barca estuviera en desequilibrio y la barca poco a poco iba volcando hasta que los dos caímos al agua.
Yo: ¡Carlos! ¡Te mato!
Y empecé a capuzarle abajo.
Yo: ¡Está helada! -y me subí a la barca-.
Carlos iba a subir y no le dejé.
Carlos: Déjame subir.
Yo: No. Ojo por ojo, diente por diente.
Carlos: Va no seas mala -me puso carita de cachorro-.
Me dio un poco de pena así que le dejé subir.
Yo: Que sea la última vez que haces eso o te dejaré ahí para que te congeles -le volví a sonreír sarcásticamente-.
Carlos: Vale -y me dio un beso en la mejilla-.
Yo: Así que vamos a mi casa a secarnos un poco.
Carlos asintió con la cabeza y fuimos a mi casa.
NARRA ANDREA.
Después de que me dijera que teníamos que hablar... Empezamos.
Yo: Es que no entiendo por qué me engañas. ¿No soy lo suficiente?
Dani: Andrea, eso no es así. No te he engañado.
Yo: Vi como la besabas.
Dani: Pero eso no fue así.
Recordé el momento en que la vi besar a otra. Me dolía, mucho.
Yo: Es que todos los tíos sois iguales -empezaron a caerme lágrimas-. Solo nos queréis para follar y poco más. ¿No os importan nuestros sentimientos? ¿No te importa que esté mal? ¿Por que me haces daño? No me lo merezco. No... Dani, estoy arta de sufrir.
Dani: Conmigo no lo harás.
Yo: Lo estoy haciendo ahora -me limpié las lágrimas-. Necesito una explicación.
Dani: Te la daré.
Yo: Empieza.
Dani: Pues unas auryners se subieron al escenario, y como no molestaban las dejamos. Yo canté con ella y de momento se me lanzó. Y en ese momento te vi a ti. La separé y le dije que que coño hacia, que no volviera a hacer nada así, que esa clase de fans me dan asco. No me respetan. Luego volví a mirarte y ya te habías ido, supuse que no escuchaste lo último, así que me quería ir en mitad del concierto pero Magí no me dejó. En el momento que terminó fui a buscarte y hasta ahora.
Yo: Vale.
Dani: ¿Vale? ¿Así sin más?
Yo: Sí, te creo.
Dani: Gracias de verdad.
Me abrazó.
Yo: Sé que no fue tu culpa. Pero evita esas cosas. Más vale prevenir que curar.
Dani: Lo sé.
Y me besó, dulcemente. Lento. Nuestras lenguas iban al compás.
Se tiró encima mía cosa que hiciera que yo quedara debajo de él.
Su respiración era irregular, entre cortada.
Me metió la mano por detrás de la camiseta, para sacarmela. No le negué. Me quitó la camiseta. Me sentía rara. Estaba en sujetador delante de él, me daba un poco de vergüenza. Pero en seguida le quité la camiseta con su ayuda y nuestras dos prendas estaban en el suelo, juntas.
Dani: Si quieres que pare, dímelo.
Yo: Calla y sigue antes de que me arrepienta.
Y le besé yo. Ahora salvajemente. Me separé. Solo se escuchan nuestras respiraciones irregulares.
Pero el sonido de nuestras respiraciones se interrumpió cuando levantamos la mirada y escuchamos un ruido. ¿De dónde venía?
Los dos nos levantamos.
Dani: ¿Quién podría ser?
Volvimos a escuchar otro ruido.
Dani: Quédate aquí, voy a ver que pasa.
Yo: Espera.
Se giró.
Yo: Lleva cuidado.
Y le besé.
Se fue y me quedé en mi habitación, esperando que volviera.
No venía... ¿por qué tardaba tanto?
Me asomé fuera de la habitación.
Yo: ¿Dani?
Nadie me contestó.
Yo: ¿Dani? ¿Estás ahí?
Y de repente me noto unas manos en mis ojos.
Mi respiración se corta. ¿Quién es?
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